Galindo no implanta todavía el sistema de ADN de las 'cacas' de los perros

La campaña va a consistir en la instalación de banderolas en las farolas junto a varias zonas verdes de la ciudad, a fin de que la ciudadanía conozca la normativa municipal y se conciencie de la necesidad de recoger estos residuos, así como otros aspectos como llevar atada a la mascota por la calle.

 
A pesar de que el Ayuntamiento ya ha llevado a cabo campañas para informar sobre el deber de la población de recoger los excrementos producidos por los perros, se ha seguido observando que con frecuencia (y en algunos jardines de forma muy visible) este deber se omite. Por desgracia, en muchas ocasiones los dueños de estos animales dejan sin recoger estos residuos, tanto en zonas verdes como en otros espacios urbanos.

 
Esta práctica genera situaciones de insalubridad que afectan a la ciudadanía en general, y especialmente a algunos sectores de la población, como pueden ser los niños y niñas durante su actividad lúdico-educativa cotidiana. Además, este mal hábito dificulta y hace especialmente penoso el trabajo de mantenimiento de parques y jardines, una labor que busca ofrecer en todo momento un adecuado estado de uso y conservación de estos espacios para que toda la población de Segovia pueda disfrutarlos.

 
 
 
Las heces en la ciudad no solo ensucian, huelen y causan caídas, sino que también facilitan la propagación de enfermedades zoonóticas o infecciones que pasan de animales a personas.

 
Mediante esta campaña, que también se difundirá a través de las redes sociales y mupis en las calles, se quiere llegar a los propietarios de mascotas que acostumbran a servirse de estas zonas verdes como lugar donde dejar los excrementos de sus animales, para que conozcan cuáles son las obligaciones al respecto y las consecuencias de omitirlas. Las mascotas también forman parte de nuestra ciudad, y por ello todo el mundo ha de responsabilizarse de sus acciones, contribuir a una mejor convivencia ciudadana y mantener limpia Segovia.

 
La Concejalía de Medio Ambiente recuerda que el deber de recoger estos residuos debe extenderse a toda la ciudad, y que su incumplimiento es una infracción grave que puede llegar a sancionarse con multas de hasta 3.000 euros. Reitera además que es obligatorio pasear a los perros con correa.

 
Esta iniciativa se suma a la que ya se lleva tiempo trabajando para la implantación de un sistema de ADN canino, que se pondrá en marcha a lo largo de este año. Además, la Concejalía tiene previsto establecer nuevos parques caninos en varias zonas de la ciudad, para que tanto mascotas como propietarios puedan contar con nuevas áreas de esparcimiento y disfrute.