Secun de la Rosa y Miguel Rellán dan vida teatral a la novela ‘Los asquerosos' en el Teatro Juan Bravo

Durante algo más de una hora y media, el Juan Bravo se convertirá en Zarzahuriel, un pequeño pueblo deshabitado, tal vez inspirado por la propia provincia de Segovia -lugar donde Santiago Lorenzo reside y donde escribió la novela-, en el que la naturaleza es el único medio de vida y en el que Manuel se refugia después de haber huido, tras apuñalar a un policía en Madrid. Y es que, el gran interés y la principal curiosidad del montaje teatral, como ya señaló el presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente, en la presentación de la programación, reside en cómo han resuelto Jordi Galcerán y Jaume Buixó, encargados de adaptar el texto, muchos de los paisajes y pasajes que llenan un libro en el que el protagonista narra en qué se basa su supervivencia en un lugar despoblado.

 
El contacto telefónico entre Manuel y su tío, la llegada periódica de la pequeña y particular compra del LIDL que ni siquiera se compone de alimentos, el trabajo de conversador que logra el protagonista para conseguir algunos ahorros, la precariedad convertida en paz y libertad y, cómo no, la llegada de dos familias al pueblo deshabitado que destrozará toda esa armonía serán algunos de los episodios que conviertan a los espectadores del Juan Bravo en auténticos ‘mochufas'; curiosos observadores de un mundo extraño y desconocido, silencioso y distante de la urbe, la rutina y el postureo de las redes sociales, tanto de las físicas como de las digitales.

 
Bajo la dirección de David Serrano y la producción de Octubre, 'Los asquerosos' lleva recogiendo numerosos éxitos de taquilla desde su estreno en el otoño de 2020. Y eso, pese a lo complicado de trasladar a la escena teatral una novela como la de Santiago Lorenzo, que ha conquistado al público por su rescate a un lenguaje tan des y por sus descriptivas narraciones. En Segovia estrenará la programación de esta temporada, después de haber agotado sus entradas en pocos días desde su puesta a la venta, y supondrá una oportunidad inmejorable de comprobar si la imagen que tenían los lectores de Santiago Lorenzo de Zarzahuriel se corresponde con la de Galcerán, Buixó y Serrano.