Obras en vías históricas en Segovia

Segovia refuerza el mantenimiento del emborrillado con mejoras en una decena de calles y una inversión cercana a los 50.000 euros
El Ayuntamiento de Segovia continúa con su plan de mantenimiento del pavimento histórico de emborrillado y, a través del área de Obras y Servicios, está ejecutando trabajos de reparación en una decena de calles de la ciudad. El objetivo es corregir desperfectos, mejorar la accesibilidad y reforzar la seguridad en vías que forman parte de la identidad urbana del entorno histórico.
Las actuaciones se desarrollan en el Paseo Segundo Rincón —en la alameda de la Fuencisla—, la ronda de Don Juan II y las calles Puerta de Santiago, Doctor Velasco, Pozo de la Nieve, Marqués de Villena, Los Zuloagas y Magdalena, esta última en el barrio incorporado de Zamarramala.
Reparaciones integrales en el pavimento histórico
Los trabajos incluyen la reposición de las piezas del solado de emborrillado con mortero semiseco de cemento y arena, además del maceteado, regado y rejuntado. También se sustituirán las losas de granito deterioradas o hundidas, se ejecutarán nuevas juntas de dilatación para evitar futuros levantamientos y se adecuarán los alcorques.
El plazo previsto para la realización de estas obras es de dos meses, siempre condicionado por la meteorología, con un presupuesto total de 48.203,68 euros.
Continuidad en la conservación del casco histórico
Estas intervenciones se suman a las acometidas el año pasado en otras calles y plazas del recinto amurallado, como Conde Cheste, San Facundo, San Sebastián, San Esteban, Díaz Sanz y Los Espejos, además de La Parra, Doctor Velasco y Moro. La actuación más destacada fue la de la plaza de Colmenares, donde se habilitó un paso accesible en el paso de peatones existente.
En conjunto, la inversión del pasado ejercicio ascendió a 45.414,45 euros. Con las nuevas obras, el Ayuntamiento habrá destinado cerca de 94.000 euros a la mejora del emborrillado entre 2024 y 2025.
Un pavimento emblemático que exige cuidados constantes
El emborrillado, característico del casco histórico, forma parte de la imagen patrimonial de Segovia, pero su mantenimiento requiere intervenciones continuas debido a la propia irregularidad del material y al tránsito peatonal. Con estas actuaciones, el Consistorio busca facilitar la movilidad, aumentar la seguridad y mejorar la imagen urbana en las zonas más sensibles del centro histórico.






























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