Profesionales chilenos visitan el centro La Fuencisla para conocer su modelo de atención centrado en la persona

El modelo de atención integral centrada en la persona que impulsa la Diputación de Segovia a través de su Área de Asuntos Sociales continúa despertando interés fuera de nuestras fronteras. En esta ocasión, cinco profesionales chilenos responsables de los servicios de cuidados a personas mayores en su país —integrados en el Servicio Nacional del Adulto Mayor (SENAMA)— han visitado el Centro de Servicios Sociales La Fuencisla para conocer de primera mano su funcionamiento.

La directora del centro, Cristina Vicente, ha mostrado su satisfacción por este nuevo reconocimiento internacional: “Es un orgullo que La Fuencisla no sea solo un referente provincial o autonómico, sino también nacional y mundial. Este modelo es fruto de años de formación, de adaptación y, sobre todo, de entender a la persona desde su dignidad y su deseo de autodeterminación”.

En la misma línea, el presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente, ha destacado que “profesionales de otras latitudes quieran comprobar que nuestros centros son realmente el hogar de quienes viven en ellos y no solo algo escrito en un papel”, algo que, según ha subrayado, no sería posible sin la implicación del conjunto de profesionales del Área de Asuntos Sociales.

Una visita enmarcada en un programa internacional

La delegación chilena participa en la segunda pasantía de expertos organizada en España dentro del programa de cooperación triangular financiado por la Fundación para la Internacionalización de las Administraciones Públicas (FIAP) y la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (AECID). Bajo el título “Elaboración de estándares de calidad para centros diurnos, cuidados domiciliarios y condominios de viviendas tuteladas del SENAMA”, este proyecto cuenta con el IMSERSO como socio estratégico.

Durante su estancia, los profesionales chilenos han recorrido las distintas instalaciones del complejo, entre ellas las unidades de convivencia ‘La Olmeda’ y ‘Prádena’, y el edificio de psicogeriatría, donde se inauguraron recientemente las nuevas unidades ‘Atalaya’ y ‘Eresma’. También han mantenido entrevistas con la jefa de Psicogerontología y con una de las residentes, lo que les ha permitido conocer de primera mano el impacto del modelo en la vida cotidiana.

Un centro abierto y referente

Vicente ha insistido en que la clave de este sistema es la personalización del cuidado y la apertura a la comunidad, con un horario de visitas amplio que facilita la presencia de las familias incluso en momentos delicados, como la enfermedad o el final de la vida. “Se trata de un modelo que es una delicia, porque pone en el centro a la persona y convierte el recurso en un verdadero hogar”, ha afirmado.

Además de recibir visitas internacionales, el centro La Fuencisla tiene presencia en los materiales formativos del IMSERSO sobre personalización de cuidados, donde profesionales y residentes comparten sus experiencias. “Es una forma de mostrar transparencia, que para nosotros es fundamental”, ha señalado la directora.

La realidad del centro

En la actualidad, en La Fuencisla viven 141 personas, distribuidas en cinco unidades de convivencia —con previsión de abrir una más antes de que finalice el año— y dos espacios residenciales que acogen a 53 personas en total. El complejo cuenta con más de 200 profesionales que abarcan desde áreas generales como cocina, mantenimiento o lavandería, hasta servicios sanitarios, psicológicos y sociosanitarios especializados.